LA AUTO- REALIZACIÓN
(Nivel de calibración
700- 849)
“TRASCENDIENDO LOS NIVELES DE CONCIENCIA. LA
ESCALERA HACIA LA ILUMINACIÓN"
Este es el nivel de los sabios, los Grandes
Maestros del Advaita o Vedanta que describen la realidad espiritual de la
Auto-realización. Es un nivel de poderosa inspiración ya que estos Sabios Iluminados
programan los campos de energía de atracción de manera que influyan en toda la
humanidad. En este nivel ya no se prolonga la experiencia de un ser personal
individual separado de los demás, sino que hay una identificación de Ser con la
conciencia y la Divinidad. La Divinidad Inmanente es realizada como Ser más
allá de la mente. Esto está cercano a la cima de la evolución de la conciencia
en el dominio humano.
Las Grandes enseñanzas levantaron a las masas y
elevaron el nivel de conciencia de toda la humanidad. Tener tal visión es
denominado Gracia, y el don que trae es la Paz infinita que es inefable y más
allá de las palabras.
En este nivel de realización, el sentido de la
propia existencia trasciende todo tiempo y toda individualidad. Ya no hay
ningún tipo de identificación con el cuerpo físico como “yo”, y por tanto, su
destino no preocupa. El cuerpo es visto como una mera herramienta de la
conciencia a través de la intervención de la mente, cuyo valor primordial es el
de la comunicación. El yo se funde en el Yo. Este es el nivel de la no-
dualidad, o completa Unidad. No hay localización de la conciencia; la
consciencia está igualmente presente en todas partes.
Las grandes obras de arte que representan a
personas que han alcanzado el nivel de Iluminado a menudo muestran al maestro
con una posición de la mano específica, llamada mudra, donde la palma de la
mano simbólicamente irradia bendición. Este es el acto de la transmisión de
este campo de energía a la conciencia de la humanidad, que también está
representado por un halo. Este es el nivel de la Divina Gracia, que
potencialmente puede evolucionar hasta 1.000, el nivel más alto alcanzado por
las personas que han vivido en la historia registrada, tales como los Grandes
Avatares para quienes el título de “Señor” es apropiado: Señor Krishna, Señor
Buda, Señor Jesucristo, y Zoroastro.
DISCUSIÓN
Más allá
de la Felicidad están los niveles de los grandes místicos para los que el
Conocimiento es la consecuencia de la Presencia de la Divinidad como Ser (Dios
Inmanente). La distinción del Dios inmanente frente al Dios trascendente es una
distinción teológica, intelectual, conceptual. La Presencia del Ser constituye
la clásica purusha, o Resplandor del Ser como Fuente. El Ser “conoce” en virtud
de la identidad con la Divinidad misma. Es por tanto su propia Consciencia, y
es por su Presencia que se hace así mismo “conocimiento” y “Conocedor”. Así, no
conoce “sobre”, sino que es el Cumplimiento de su propia Esencia.
La trascendencia de la Felicidad puede permitir
la reanudación de la función limitada por la cual la reentrada de algunos en el
mundo es de nuevo posible. Esto es ahora, sin embargo, una emergencia en el
dominio no- lineal en lugar de una decisión, aunque en la apariencia externa,
es erróneamente percibida como volitiva. En realidad, no hay “decisor” que
“decida”, ni hay “opciones” que necesiten elección o decisión. La vida se
vuelve fenomenológicamente autónoma como expresión de la evolución de la
Creación y el campo omnipresente de la conciencia misma, el cual también es
innatamente versátil, en virtud de la cualidad de su Esencia.
Los niveles de conciencia 600 en adelante son
clásicamente denominados “no mente”, porque se detiene la secuencia de
pensamientos y en su lugar está la consciencia no- lineal de la conciencia
misma, la cual es a menudo referida como Mente en el mundo de la literatura. En
virtud de la Divinidad, lo No Manifestado como potencialidad se vuelve
Manifestado como realización. El Místico Iluminado se convierte en el traductor
de la explicación de lo Innato hacia la descripción expresada por la cual se
hace conocido para el mundo. Subjetivamente, la Presencia es esa conciencia
misma, cuya cualidad es la de la Verdad como expresión del Amor y,
recíprocamente, del Amor como el resplandor de la Verdad.
Los niveles de conciencia de los 700s son
históricamente clasificados como los niveles de la Auto-Realización o de los
místicos avanzados, como los representados en tiempos recientes por Ramana
Maharshi, Nisargadatta Maharaj, Sri Aurobindo, Mahatma Gandhi, y Patanjali.
Escritos familiares en estos niveles son las enseñanzas Zen de Bodhidharma; la
Nube de lo Desconocido; el Diamante, el Corazón, y el Lotus Sutras; el Corán,
el Nuevo Testamento (sin el Apocalipsis); y el Yoga Sutras de Patanjali, así
como el Rig Veda. (Para mayor comodidad, una lista representativa se incluye al
final del capítulo).
Es de destacar que varios de los maestros más
conocidos son relativamente recientes. Algunos han sido reconocidos ampliamente
por la sociedad. Su impacto sobre la sociedad es en los dos niveles en que
ellos han expresado sus enseñanzas específicas y al mismo tiempo en silencio
irradiaban un campo de energía desde sus auras a la conciencia colectiva de la
humanidad. El efecto de esa radiación es doble: el primero es contrarrestar la
negatividad en el mundo, y el segundo es para contribuir a una elevación de la
evolución global de la conciencia de la humanidad en general y de los devotos
en particular.
Como se mencionó anteriormente, el nivel de
conciencia de las masas fue de 90 en el momento del nacimiento del Buda, de 100
en la época de Jesucristo, y luego se elevó a 190, donde permaneció durante
muchos siglos. A finales de los 1980s, de repente saltó a 205 y avanzado de
nuevo en noviembre de 2003 a su nivel actual de 207.
En la literatura espiritual tradicional, hay
descripciones y clasificaciones de los distintos niveles avanzados de
conciencia descritos como estados de Samadhi. A menudo, estos son
descriptivamente asociados a estados de meditación consecuencia de trascender
las limitaciones del ego.
Algunos de estos son transitorios, tales como
los diversos estados denominados como satori, o despiertos. Estos son a menudo
dependientes del estado de meditación en sí. Al comienzo, el estado de satori
requiere permanecer con los ojos cerrados. A medida que se desarrolla,
continúa, incluso con los ojos abiertos. A medida que avanza más, permanece
incluso con los ojos abiertos, y andando, reanudando la actividad. Como las
famosas imágenes del buey Zen pastando, originarias de los 1500s, muestran, la
progresión es primero localizar e identificar el ego (el buey), entonces
amansarse, luego trascenderlo, luego dejar el mundo, luego el mundo desaparece,
y entonces, como un sabio maduro, volver al mundo. En este punto, el mundo se
representa como un simple reflejo en el agua (de la conciencia misma).
Parece que a medida que evoluciona la
conciencia, parece permanecer en un nivel determinado por períodos variables de
tiempo que son descritos como períodos de “maduración”, reajuste, y ajuste del
campo de energía más avanzado. Es necesario un reajuste en el funcionamiento y
la ubicación del cuerpo y la reanudación de las funciones fisiológicas, así
como la capacidad de hablar y comunicarse. Por ejemplo, Ramana Maharshi,
después de una Iluminación inesperada, repentina, estuvo mudo durante dos años
hasta que se animó a hablar. Él no cuidó del cuerpo en absoluto. Nisargadatta
Maharaj deambuló a pie hacia los Himalayas y tuvo que ser llevado de vuelta a Bombay.
La experiencia subjetiva de este retorno es que
es una respuesta espontánea al amor, la apelación, la súplica, o la influencia
de los demás en el entorno. En el interior, la mente está en silencio y no
existe la inclinación “personal” a hablar o la necesidad de comunicarse, ni
siquiera existe ninguna necesidad de continuar con la vida del cuerpo en si
mismo.
Intrínsecamente, cada nivel avanzado de la
conciencia es completo en sí mismo. La mayoría de los sabios se han quedado en
un nivel dado de por vida; otros han logrado volver a operar en el mundo en áreas
limitadas.
Volver a operar en el mundo requiere reajustes
que son difíciles de describir. La gente en el mundo considera que el sabio es
una persona individual. Inicialmente, esto es bastante sorprendente, porque no
hay ninguna persona individual presente a quien hablar. Lo que evoluciona es el
desarrollo de una interfaz con el mundo, mejor descrito como una “persona”. No
es sino la realidad interior la que responde a las expectativas del mundo que
percibe el Ser localizado en un cuerpo individual separado y una identidad
separada (la “personalidad”). De alguna manera, estas expectativas del mundo
son un poco cómicas; los intercambios son de una dimensión mayor de la que el
mundo percibe.
Otra dificultad que requiere de ajuste es la
comprensión de la comunicación verbal de los demás. A pesar de que se escuche
auditivamente, hay un ligero retraso por el que el proceso de traducción
interno revela la intención del hablante con las palabras. Así, la persona
parece actuar como una interfaz traslativa, y su desarrollo es autónomo. Puede
haber un retraso de incluso años antes de que tal fenómeno se produzca. Algunos
sabios nunca salieron de sus lugares de origen. Ramana Maharshi se quedó en la
Montaña Aranachula toda su vida. Despues de su muerte, el ashram se mantuvo
activo y sigue allí. Nisargadatta Maharaj, después de vagar por los Himalayas,
se quedó en su habitación ático en Bombay sobre las tiendas del bidi. Ese
estilo de vida refleja también una interfaz con las tradiciones culturales.
El sabio verdaderamente iluminado no tiene
ningún interés en desarrollar “seguidores”, controlar las vidas de los
seguidores, la construcción de edificios, la teatralidad, o las posesiones
mundanas. No hay necesidades o deseos que deban cumplir, y mucho menos el deseo
de controlar a los demás. Además, las observaciones del maestro pueden ser
vistas como crípticas porque son breves, precisas, hasta el punto de que nada
más necesita ser dicho.
El término “trascendencia” es realmente un
estilo de lenguaje, porque en el dominio no- lineal, hay dimensiones
progresivas en lugar de los niveles reales. En cambio, la transición podría ser
más correctamente comparada a la luz del sol que surge como consecuencia de la
evaporación de las nubes. En estos niveles, la condición o estado de conciencia
puede o no evolucionar más durante esta vida, dependiendo de la potencialidad
kármica y voluntad Divina. La entrega de la identificación con cada estado se
cede, incluyendo el abandono de cualquier apego a lo que es familiar. La
conciencia se desarrolla como atraída por regresar a su Fuente. Cada avance
amplía el paradigma de la consciencia que, transitoriamente, tuvo cierta
sensación de “hogar”.
Muchos sabios, una vez que alcanzan el nivel de
los 700s, permanecen en ese nivel durante el resto de sus vidas.
Ocasionalmente, sin embargo, el proceso continúa espontánea cuando se les
permite hacerlo.
Cada nivel representa la culminación de la
evolución que le precede, pero es también la puerta hacia el siguiente.
Subjetivamente, la transición es más como una emergencia o un desdoblamiento,
el cual es la región de la consciencia en si misma, sobre la que no hay opinión
porque estos son los estados de la “no-mente” (paradójicamente, también
denominado como “Mente”).
A partir del nivel 700 en adelante, las
resistencias que residen en la conciencia colectiva de la humanidad han de ser
trascendidas en el interior del maestro. Esto es física y subjetivamente cómodo
hasta que se alcanza el nivel de conciencia de aproximadamente 800, en el cual
surgen síntomas en ocasiones de dolor físico y el sistema nervioso se siente
como llevando demasiada electricidad, provocando una sensación de ardor. Cada
vez que algo surge de la conciencia colectiva, ha de ser procesado. (Jesucristo
sudó sangre, y el Buda señaló que sentía sus huesos como si se estuvieran
rompiendo). Numerosos síntomas han sido informados en estos escritos anteriores
y por diferentes místicos a lo largo de la historia).
A diferencia de los síntomas físicos o dolores
que pueden ser manejados por la no resistencia, estas ardientes sensaciones
eléctricas persisten hasta que el error específico en el inconsciente colectivo
es identificado y voluntariamente entregado y clarificado. Mientras que el
funcionamiento en los 700s es teóricamente posible (por ejemplo, la Madre
Teresa), hay retrasos en este nivel para controlar los fenómenos internos
derivados. Para facilitar esta transición, es útil tener conocimientos del
sistemas de chakras y los diferentes arquetipos de Jung del inconsciente
colectivo. Estos están representados por varios subgrupos sociales / culturales
y sus actitudes endémicas y posicionamientos que pueden ser intuidos o
diagnosticados por la técnica de la calibración de la conciencia.
La entrega a una profundidad cada vez mayor se
vuelve la invitación para la progresión de la conciencia / consciencia, y esto
ocurre a un nivel más allá de la intención, porque el proceso esta auto-
evolucionando.
La actitud de invitación a la entrega podría
ser comparado a una postura de la conciencia muy “Yin”, lo que también podría
estar físicamente comparado con un mudra (posición clásica de las manos). Por
tanto, la postura general de la consciencia es una de las “indemnizaciones” (a
recibir) en lugar de la contratada actitud “Yang” de la intencionalidad (a
conseguir). Por la orientación con la entrega de ser un canal de la voluntad de
Dios, la propia vida es transformada en una oración por la cual uno es esa
oración.
CALIBRACIÓN DE LOS
NIVELES DE ALGUNOS MAESTROS Y ESCRITOS EN LOS 700S
MAESTROS
|
ESCRITURAS
|
Bodhidharma
|
795
|
Bodhidharma, Charya,Adi Sankara
|
740
|
Enseñanzas Zen de Leon, Moses
|
795
|
Nube de
lo desconocido
|
705
|
de
Granada
|
720
|
Diamond
Sutra
|
700
|
Dogen
|
740
|
Sutra del
corazón
|
780
|
Eckhart,
Meister
|
705
|
Coran
|
700
|
Gandhi,
Mahatma
|
760
|
Lotus
Sutra
|
780
|
Maharaj,
Nisargadatta
|
720
|
Nuevo Testamento (Reina- Valera
-King James en inglés, menos el libro
del Apocalipsis)
|
790
|
Maharshi,
Ramana
|
720
|
Patanjali
|
715
|
Plotinus
|
730
|
Shankara
|
710
|
Santa
Teresa, de Avila
|
715
|
Rig Veda
|
705
|
Yoga
Sutras, Patanjali
|
740
|
Ramayana
|
810
|
Madre
Teresa
|
710
|
(Nota de Plotino: Sus escritos disponibles,
como se indica en los Grandes Libros del Mundo Occidental calibran a 503. El
propio Plotino en la vida posterior calibró a 730).
__________________________________
Transcending the Levels of
Consciousness, by David R. Hawkins,
M.D., Ph.D.
“TRASCENDIENDO LOS NIVELES DE CONCIENCIA. LA ESCALERA HACIA LA ILUMINACIÓN”:
CONTACTO / COMENTARIOS / INQUIETUDES
* E-mail: ayurvedavidayarmonia@gmail.com
* E-mail: ayurvedavidayarmonia@gmail.com
+57 3136129225 / +57 3128704172 * Santa Rosa de Cabal - Colombia
No hay comentarios:
Publicar un comentario